¿Amar de verdad?

 

Amar de verdad, eso es algo que la mayoría de las personas de este planeta no conocemos en esencia.

Seguramente cuando leíste el título creíste que te voy a hablar del clásico amor de pareja. Pero no es así.

 Desde que comenzamos a crecer nos enseñan el amor de familia, un amor que crece porque compartimos todo el tiempo con las mismas personas y nuestra forma de ser o carácter se desarrolla alrededor de lo que vemos en ellos. El amor por los amigos. Yo diría que este amor comienza en el momento en que pasamos por una situación difícil (independientemente de la edad) y son personas que estuvieron ahí para nosotros. Un amor de pareja, mal infundado por las grande películas y series de Hollywood. Un amor que nace y crece de tantas distintas maneras y que en cada una de ellas se esconde el misterio de una vida junto a alguien. Pero, ahora bien, que es amar de verdad.

Dentro de todas las definiciones que entramos en la RAE, yo escojo, sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo; o, objeto de cariño especial para alguien.

En la biblia podemos encontrar cientos de versículos que mencionan la palabra amor, pero yo diría que dentro de los más importantes están: San Juan 3:16 / Romanos 5:8 / 1 Juan 4:7-8 / San Mateo 22:39. Si piensas en estos pasajes, ¿serias capaz de amar como se nos indica? Ese, (para mi) es el amor de verdad. ¿Serias capaz de dar a tu hijo para que una persona pueda tener salvación? ¿Serias capaz de amar a los demás como lo haces contigo diariamente?

Hay tantas preguntas que nos podemos hacer (y deberíamos) para saber si realmente estamos amando de verdad. Pero piensa en estas preguntas:

• ¿Cuándo fue la última vez que tuviste que perdonar a alguien? ¿De verdad lo hiciste o todavía piensas en ello y te crea sentimientos “malos”?
• ¿Cuándo fue la última vez que trataste a alguien como te gustaría que te hubieran tratado a ti en la misma situación? ¿o preferiste dejar tu orgullo intacto y seguir de largo?
• ¿Cuándo fue la última vez que hiciste una acción que tu ser se revisito de gozo porque sabes que hiciste algo que Jesús hubiera hecho si estuviera en este tiempo?
• ¿Cuándo fue la última vez que hiciste un sacrificio para demostrarle amor y adoración a Dios?

Si ya te contestaste estas preguntas, ¿con cuanta frecuencia suceden estas cosas en tu vida?

A final de cuentas, amar de verdad no simplemente se nota en nuestro trato a seres queridos (familia, amigos, etc). Sino en que hagamos diariamente cada una de las cosas que Dios nos envía. Que seamos capaces de reflejar el amor que hemos conocido, que hemos experimentado, que es Dios. Dar hacia delante más de lo que hemos recibido por gracia y misericordia de Dios.

¡Hasta la próxima!

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